La inseminación artificial es una de las técnicas de reproducción asistida más utilizadas en la actualidad. Se trata de una de las técnicas más sencillas que consiste en la introducción de los espermatozoides dentro del útero de la mujer con el fin de facilitar la fecundación del óvulo, y, en consecuencia, que se produzca el embarazo.
A continuación, desde Aísa, Clínica de reproducción asistida de Zaragoza, resolvemos algunas de las preguntas más frecuentes acerca de esta técnica.
¿Qué es la inseminación artificial?
La inseminación artificial es una de las técnicas más sencillas de reproducción asistida. Se trata de una técnica completamente indolora para la mujer y que se lleva a cabo de forma rápida y sin molestias.
Mediante este procedimiento, el médico especialista introduce una muestra de semen en el interior del útero de la mujer, con la finalidad de que el óvulo sea fecundado. En cierta forma esta técnica simula la fecundación natural.
¿Qué tipos de inseminación artificial existen?
Se distinguen dos tipos de inseminación artificial, en función de quién es el donante de la muestra de semen.
En el caso de que el donante sea la pareja de la mujer, hablaríamos de Inseminación Artificial Conyugal (IAC).
En el caso de que la muestra provenga de un donante anónimo, estaríamos ante una Inseminación Artificial de Donante (IAD). Esta segunda opción se utiliza en los casos en los que o bien la mujer no tiene una pareja donante o bien la pareja masculina tiene algún problema de fertilidad que produce la inviabilidad los espermatozoides.
¿En qué casos se realiza la inseminación artificial?
La inseminación artificial es una técnica que puede ser útil en distintos casos relacionados con problemas de fertilidad. Según sea el caso concreto, será necesario elegir entre la Inseminación Artificial Conyugal, o a través de Donante.
En el primer caso, cuando la muestra de semen se obtiene de la pareja, se podrán tratar casos de infertilidad relacionada con:
- Problemas de esterilidad de la mujer relacionada con un problema en el cuello del útero.
- Casos de endometriosis de leves a moderadas.
- Alteraciones en el ciclo ovulatorio.
- Imposibilidad de depositar el semen de forma natural en la vagina: impotencia, eyaculación precoz, vaginismo…
- Esterilidad de origen desconocido: en ocasiones las pruebas realizas no arrojan una causa aparente para la infertilidad. Debido a que la inseminación artificial es la técnica más sencilla de reproducción asistida, se suele empezar por este tratamiento.
En otras ocasiones es necesaria llevar a cabo la inseminación artificial con la muestra de un donante:
- Esto puede ser debido, o bien a la ausencia de pareja, por ejemplo en el caso de mujeres solas o en el caso de parejas lesbianas.
- En otros casos, aunque haya una pareja varón puede ser que este no sea un donante válido. Por ejemplo si es portador de alguna enfermedad genética no evitable, ser portador de alguna enfermedad de transmisión sexual, etc.
¿Qué pruebas previas se realizan?
Antes de optar por este tratamiento de reproducción asistida, es necesario determinar si tanto la mujer como el hombre cumplen los requisitos mínimos establecidos para que esta pueda tener éxito.
Debe comprobarse la permeabilidad tubárica de la mujer, es decir, que sus trompas de Falopio son perfectamente funcionales, ya que la fecundación se lleva a cabo dentro de estas.
En cuanto a la pareja varón, deberá comprobarse que tiene una calidad de semen suficientemente buena.
Asimismo, es necesario descartar la existencia de cualquier infección que pudiera transmitir el donante varón a la mujer o el futuro hijo: VIH, Sífilis, Hepatitis…
También hay que tener presente que la edad es un factor determinante a la hora de hablar de posibilidades de éxito.
A partir de los 36 años, se disminuyen considerablemente las probabilidades de embarazo en el caso de la mujer por lo que la inseminación artificial se recomendienda hasta la edad de 37-38 años. A partir de esta edad en muchas ocasiones se recomienda directamente la fecundación in Vitro, otra de las técnicas de reproducción asistida.
¿Cómo se realiza la inseminación artificial?
De forma previa, la mujer recibirá medicación hormonal durante los días previos a la inseminación, con el fin de producir una estimulación ovárica, lo que aumentará las posibilidades de que se produzca el embarazo.
La muestra de semen asimismo será tratada en laboratorio con el fin de seleccionar los mejores espermatozoides.
El día señalado para la inseminación, dicha muestra de semen se introducirá en el útero de la mujer a través de una cánula guiada por ecografía. Esta manipulación es totalmente indolora para la mujer.
Para elegir el día adecuado, también se hará un control sobre la fase en la que se encuentra de la mujer, eligiendo el día en el que esté ovulando, lo que aumenta a su vez las probabilidades de éxito de la técnica.
La finalidad de esta técnica es que se produzca la fecundación del óvulo en las trompas de Falopio, tal y como sucede con un embarazo normal.
¿Cuáles son las probabilidades de éxito de la inseminación artificial?
En la actualidad las tasas de éxito de esta técnica rondan entre el 15% y el 30%.
Estas dependerán en gran medida del estado de la salud reproductiva de la mujer así como de las condiciones del esperma donado. Gracias a la estimulación ovárica previa y al tratamiento del esperma en laboratorio, se aumenta en la medida de lo posible las posibilidades de que se produzca el embarazo.
Lo habitual es realizar varios ciclos de inseminación con el objetivo de aumentar estas probabilidades de éxito. Si finalmente no se consigue el embarazo, entonces sería hora de plantear otro tipo de técnicas como la fecundación in Vitro.
¿Cuál es el precio de la inseminación artificial?
El precio de la inseminación artificial es variable de unas clínicas a otras, ya que, además, hay que tener en cuenta que no todos los casos son iguales, y que será necesario llevar a cabo unas pruebas previas tanto a la mujer como a su pareja (o donante).
Hay que tener en cuenta además, que cuando se realiza a través de un donante anónimo, el precio puede ser sensiblemente superior.
Lo que podemos garantizar desde Clínica Aísa es que se realizarán solo las pruebas que sean estrictamente necesarias para llevar a cabo un diagnóstico preciso y todas aquellas encaminadas a conseguir la mayor probabilidad de éxito posible.
En ese sentido, uno de los pilares básicos de nuestra clínica de reproducción asistida de Zaragoza es la honestidad. Informamos en todo momento a nuestros pacientes de todo lo que vamos a realizar y el motivo de ello.
¿Es necesario hacer reposo tras una inseminación artificial?
Tras someterse a un tratamiento de inseminación artificial, muchas pacientes nos consultan acerca de si es necesario realizar algún tipo de reposo para aumentar las probabilidades de éxito.
En realidad, ningún estudio al respecto demuestra que sea necesario realizarlo y que este influya sobre el resultado de la inseminación.
El consejo de los especialistas es llevar a cabo nuestra rutina habitual, es decir llevar una vida normal.
No hay que olvidar que es aconsejable estar lo más tranquila posible, sin estar presionada o nerviosa por los resultados finales. Volver a nuestra rutina nos ayuda a no estar preocupados por el resultado.
El componente psicológico cuando se llevan a cabo tratamientos de reproducción asistida también es importante.
Además, un reposo excesivo tampoco es conveniente. El movimiento al fin y al cabo facilita la irrigación sanguínea en nuestro útero, favoreciendo su receptividad.
Debes tener en cuenta que cuando se produce un embarazo natural, las mujeres no realizan ningún reposo especial y pueden transcurrir unas cuantas semanas hasta que confirmen su embarazo. Solo en casos excepcionales, se recomienda el reposo de la embarazada, pero son causas que no guardan relación con el tratamiento de inseminación.
¿Dónde puedo llevar a cabo el tratamiento de inseminación artificial?
Existen varios centros en Zaragoza donde puedes llevar a cabo tu tratamiento de inseminación artificial.
Este puede ser solicitado a través de la Seguridad Social, por ejemplo el Hospital Miguel Servet es uno de los centros públicos de referencia para la inseminación artificial. El inconveniente principal es el elevado plazo de espera para someterse a dicho tratamiento.
Nosotros, en Clínica Aísa, estamos totalmente especializados en fertilidad y técnicas de reproducción asistida.
Gracias a nuestros años de experiencia, y a contar con uno de los equipos médicos más punteros en este sector, estamos orgullosos de contar con una de las tasas de éxitos más elevadas del país.
¿Cuáles son los riesgos de la inseminación artificial?
Los riesgos de la inseminación artificial están derivados de la propia técnica.
Algunos de los más comunes son:
- Reacciones alérgicas: pueden producirse alergias por algunos componentes presentes en los líquidos que se utiliza para el lavado.
- Reacciones inmunológicas: se da en algunas mujeres con alergias al líquido seminal, sucede en un porcentaje muy bajo de casos.
- Infecciones pélvicas o vaginales: pueden producirse infecciones por el propio instrumental al ser zonas delicadas y sensibles.
Este tipo de riesgos se dan en escasas ocasiones y el personal está altamente cualificado para detectarlo y ayudar al paciente a solventar los problemas que puedan surgir.
Ante cualquier molestia previa o posterior al tratamiento no dude en consultar a los profesionales o en llamar a nuestra clínica y le atenderemos.
Muchos son los pacientes que han acudido a nuestra clínica de reproducción asistida desde incluso otras poblaciones como Huesca, Teruel, Logroño o Pamplona, debido a que utilizamos las técnicas más avanzadas tanto en diagnóstico como en reproducción asistida: inseminación artificial, fecundación in Vitro…
Además, nuestra clínica de reproducción asistida es centro colaborador de Adeslas por lo que si eres mutualista de esta compañía podrás tener acceso a técnicas de reproducción asistida.
¿Queréis formar una familia? Poneros en manos de los mejores profesionales. En manos de Clínica Aísa.
